
La COVID-19 no es un juego, la vida humana se respeta, nadie tiene derecho a quitarle la salud a otra persona ni mucho menos a ponerla en riesgo de contagiarse.
Y adquirir la enfermedad que más daño nos ha hecho en los últimos 100 años.
Después de más de año y medio de pandemia no se puede alegar ignorancia.
Actividades Masivas
Continuar promoviendo actividades masivas, es el peor error de salud pública, lo más dañino para la economía a plazo mediato y el acto menos solidario que puede realizar un ser humano o un gobierno.
Contagiar a una persona es una responsabilidad enorme, porque te llevas la salud de una persona y de su familia.
Le incrementas sus gastos económicos, aumentás su sufrimiento humano y lo dejas marcado de por vida por los daños que quedan.
Responsables
El gobierno, el empresario privado, el político, el influencer, el pastor evangélico, el dueño de la ruta, del bus y del transporte público.
Son responsables de la vida y la muerte de miles de personas en este país. No podemos evitar esta responsabilidad.
Es necesario decir ¨Basta ya de contagio¨, no tienen ningún derecho, pero especialmente vos sos el que decides si participas o no en una aglomeración, molote o en un lugar donde no se respeten las medidas preventivas.
Sí, todos somos responsables de contagiarnos, de contagiar a tu familia, padres y abuelos, a tus compañeros de trabajo.
Simple y sencillamente por querer seguir ignorando la realidad y actuar sin conciencia y con un alto nivel de irresponsabilidad.
En nuestras manos está rectificar, que es de gente inteligente, tomar decisiones correctas, justas, solidarias y seguras.
Si cada uno se suma a decir ¨Basta ya de contagio¨, estaremos comenzando a controlar la epidemia.